La pareja cristiana fue amenazada con ser desalojados de la residencia para ancianos Smith Run. El delito, realizar reuniones cristianas en sus instalaciones.
Ken Hauge es un ingeniero mecánico y ministro que, junto a su esposa, se dedica a pastorear una pequeña iglesia. Para inicios del 2017, Ken y su esposa se mudaron a un departamento de Smith Run, ubicada en Fredericksburg, Virginia. 
Cuando la pareja de 80 años llegó a la comunidad, algunos de los residentes les rogaron que dirigieran un estudio bíblico. “Estuve de acuerdo con la petición, no me pude negar”, menciona Ken. Luego de una insistente petición a la gerencia de Smith Run, se habilitó un espacio para sus reuniones.
Sin embargo, la reunión no podía darse con toda libertad. Después de constantes hostigamientos por parte de la gerencia, la pareja recibió una carta de advertencia que le indicaba cesar las reuniones cristianas o, de lo contrario, tendrían que ser desalojados.
"Expulsar a residentes ancianos de su casa por realizar un estudio bíblico no es solo repugnante, es ilegal", dijo la abogada Leah Patterson en un comunicado para The Christian Post. Actualmente aún se encuentran lidiando esta batalla, oremos por nuestros hermanos.
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