Tras un bombardeo, un exterrorista de Afganistán tuvo una experiencia maravillosa con Jesús, la cual le reveló quién es Dios. Ahora es una nueva criatura y vive para Cristo.
Con tan solo 17 años, Shuhaib* fue reclutado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) para operar en Afganistán. Creció en un hogar que seguía la ideología más extrema del islam. En 2001, perdió a su madre y a tres de sus hermanos en un ataque militar estadounidense que buscaba acabar con las masacres que perpetraban los talibanes*.
Con el apoyo de soldados estadounidenses, Shuhaib escapó junto a su padre y su hermana, Sameera*. Lograron reconstruir sus vidas pero, ante las pérdidas, su rabia contra los cristianos aumentó. Después de dos años, el padre de Shuhaib murió en un accidente y su hermana, Samira, se convirtió al cristianismo luego de haber sido sanada por Jesús.
Shuhaib continuaba con sus misiones terroristas, y ella solo oraba para que él tuviera un encuentro con Dios. Su corazón empezó a ser tocado el día que, milagrosamente, resultó ser el único sobreviviente en un ataque realizado por un escuadrón antiterrorista. Mientras huía herido, sintió a alguien sosteniendo su mano, ayudándole a correr más rápido.
En esos momentos críticos, también oyó una voz que decía: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie viene al Padre, sino por mí”. Al día siguiente, Shuhaib llegó a una aldea y fue recibido por una familia cristiana que sanó sus heridas. Al despertar, le preguntaron: "¿Podemos compartirte un versículo?". Él asintió.
"Jesús dijo: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie viene al Padre, sino por mí", recitaron ellos al unísono. Shuhaib recordó que esas eran las mismas palabras que había oído mientras huía. Se levantó con rabia al oír que esas palabras venían de Jesús. Y cuando supo que todos ahí eran cristianos, quiso irse.
"Jesús salvó tu vida de una gran tragedia. Él no es tu enemigo, Él te ama. Puedes irte si quieres, pero, por favor, déjanos orar por ti antes. Dios te trajo aquí por eso", le dijo un pastor. Y así lo hicieron. Shuaib se durmió de nuevo, y soñó con Jesús y una enorme multitud de personas detrás de Él, entre ellas estaba su hermana, Sameera.
"Yo soy el Príncipe de Paz y el Eterno Salvador. Sígueme y glorifica a Dios", le decía Jesús en su sueño. Shuhaib se despertó y se entregó a Jesús. Pocos días después, el exterrorista se unió a su hermana, ahora ambos sirven al Señor con mucha devoción y fidelidad. Dios está bendiciendo enormemente a esta familia. ¡Unámonos en oración por ellos!
(*) Nombre modificado por motivos de seguridad
(*) Los talibanes: nombre recientemente cambiado al de «Emirato Islámico de Afganistán». Son una facción político-militar fundamentalista islámica sunní de Afganistán, actualmente llevando a cabo una guerra (o yihad) dentro del mismo país.
(*) Imágenes referenciales
(*) Con recursos de Guiame
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